Adivina adivinanza

Hace unos días, cuando estábamos en clase, tuvimos que presentar algunos recursos que habíamos encontrado en la web. Hubo algunos grupos, entre los que se incluye el mío, que encontraron varios en los que se trabajaban las adivinanzas.

En ese momento recordé que cuando iba a primaria teníamos una asignatura que se llamaba “juegos inteligentes”, la cual esperábamos todos los alumnos con ansia, ya que para nosotros era la mejor asignatura de todas. En ésta trabajábamos todo tipo de juegos en los que se necesitaba pensar, entre los cuales estaban los acertijos y las adivinanzas.

Al comenzar la clase, tres o cuatro niños salíamos a contar nuestra adivinanza o a escribir nuestro jeroglífico inventado, para mí personalmente era la mejor parte de la clase ya que podías enseñar a los demás lo que habías estado buscando y trabajando durante la semana. Cada alumno tenía un cuaderno en el que iba apuntando todas las adivinanzas que se inventaba o buscaba, y también algunas que le gustaban de las que decían sus compañeros, así al final de curso todos los alumnos teníamos nuestro librito de adivinanzas propio.

Ahora me doy cuenta de que era una muy buena forma de trabajar el lenguaje ya que las adivinanzas  ayudan a adquirir más vocabulario por el hecho de que de alguna forma son definiciones.

Además de esto, se trabaja el desarrollo de la mente y la comunicación oral, ya que las adivinanzas, como los trabalenguas, villancicos y retahílas entre otros, son textos de tradición oral y la forma de jugar y trabajar con estos es oralmente.

Otro punto que me gustó mucho es que es el alumno el que elabora su propio libro, desde mi punto de vista es algo muy interesante ya que gracias a esto, fomentas el trabajar la lecto-escritura desde una perspectiva más entretenida para los alumnos.

Cuando volví a casa un par de días después de haber tratado el tema de los recursos de las adivinanzas, me puse a recordar todo esto y se me vino a la cabeza que aun guardaba mi librito de adivinanzas, así que me puse a buscarlo y finalmente lo encontré. Para acabar me gustaría poneros la última adivinanza que tengo en mi librito:

“Esto que te digo

solo te lo digo

para que tú me digas

lo que yo te he dicho”.

                                

Clara Gracia Pina