A partir de la sesión teórica que hemos realizado
hoy en clase, nos disponemos a realizar una escritura colaborativa desde la
oralidad después de la lectura de la obra de Maurice Sendak, (1964). “Dónde viven los monstruos”. Se trata de un clásico de la
literatura infantil la cuál vamos a reescribir siguiendo la teoría de Emilia
Ferreiro, que cómo bien dice el título consiste en reescribir un cuento desde
la voz del narrador. En este caso se va a realizar desde la voz de Max, el
protagonista de esta obra.
La noche del 8 de Octubre en la que me puse mi traje
de lobo y me dediqué a hacer faenas de una clase…
Y de otra.
Mi madre me llamó <¡MONSTRUO!>
Y yo le
contesté ¡TE VOY A COMER!.
Y me mandaron a la cama sin cenar.
Esa misma noche nació un bosque
en mi habitación.
Y
creció…
Os
invitamos a que continuéis este cuento, hasta conseguir llegar a su desenlace.
Publicado por: Beatriz Puértolas y Marina Ruiz
y creció hasta que había lianas colgando del techo y las paredes se convirtieron en el mundo entero
ResponderEliminary apareció un océano con un barco particular para mí, y me fuí navegando a través del día y de la noche...
Entrando y saliendo por las semanas, saltándome casi un año...
ResponderEliminar¡Hasta llegar a donde viven los monstruos!
Y cuando llegué al lugar donde viven los monstruos, ellos rugieron sus rugidos terribles y crujieron sus dientes terribles...
Se trata de un libro de literatura infantil en el cuál los niños pueden vivir un sueño a través de su protagonista(Max)y con ello favorecer su imaginación.
Yo he trabajado este libro, con 3 niños de 1º de infantil y es muy interesante observar las respuestas que pueden dar cuando les permites disfrutar del cuento en primera persona, a través de disfraces y de la creación de una historia paralela.
Es increíble como aprenden el vocabulario y trabajan el diálogo entre ellos para contar el cuento (dentro de sus posibilidades).
Ana Aniés
hasta que dije: «¡QUIETOS!»
ResponderEliminary los amansé con el truco mágico de mirar fijamente a los ojos amarillos de todos ellos sin pestañear una sola vez y se asustaron y me dijeron que era el más monstruo de todos y me hicieron rey de todos los monstruos.
«Y ahora», dije, «¡que empiece la juerga monstruo!»
Sandra Sierra Andorra
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ResponderEliminar¡Y todos comenzamos a bailar y trepar por los árboles!
ResponderEliminarHasta que dije: ¡Se acabó! Y envié a los monstruos a la cama sin cenar.
María Lecina